Santiago de Chile 07 de febrero 2023
Por: Karen Astorga Tejerina.
El niño Jesús esa noche durmió como nunca abrazado a un sable; el de Baquedano…
Hace más de 182 años, Manuel Jesús Baquedano González, escapaba de su casa para embarcarse en el transporte “La Hermosa Chilena” y unirse a las tropas que partían a la Guerra contra la Confederación Perú-boliviana; al tiempo después participaría en nada menos que “tres batallas”; y ya a los 16 años cumplidos, habría de alcanzar más o menos, los mismos números de muertes que se le atribuyen a un genocidio.
En las huellas que va dejando el paso del tiempo, hace casi cuatro años (a la fecha), un 19 desde octubre del 2019, se “celebró y padeció”, lo que se llamó “estallido social” y fue en uno de esos días caluroso y efervescente, en qué se esperaba cada viernes con ansias, para ir a “Dignidad” a gritar, pedir y exigir las justas demandas que venían dormidas desde hace más de 30 años de historia, en donde ocurre este mágico relato.
Un día de aquellas manifestaciones y tumultos calurosos, con 34° de temperatura, los niños, jóvenes y mujeres en situación de calle salían , y avanzaban desde las riberas del Mapocho, para ir a “tirarse” a los verdes y cuidados pastos del Bustamante; no importando si eras peludo, moreno, gordo o hediondo, ahí todos esperaban y compartían alguna cerveza, cigarro o pito (si se daba la mano), también, muchos niños/as salían de ahí, de abajo del puente y se mezclaban entre el pueblo; sin miedo, sin esconderse, sin vergüenza, sin diferencias.
Fue uno de esos días de “marcha”, en que un personaje llamado Jesús (nombre ficticio o real, por su seguridad) se acercó y junto con comentar que había vivido los infiernos del SENAME , destacó una historia, una que lo hace héroe, único, o lo hace historiador; quizás mejor que Baquedano, que los milicos o que los pacos, y por supuesto mejor, que los torturadores de aquellos años en la dictadura militar de Chile.
Contextualizando un poco y solo un poco, para no resaltar obras de asesinos, les resumo que Manuel Jesús Baquedano estudió en el Instituto Nacional y fue compañero y amigo de personajes como Eusebio Lillo, cosa que tampoco importa tanto, más que fue también el creador del himno nacional, otro símbolo milico y patriota.
Enfocándonos en la historia que nos importa contar entonces, el 11 de enero del 2020 con una temperatura de 34 grados; la PDI detenía a un el sujeto que tenía el Sable de Baquedano, él que había sido envuelto en una bandera chilena (según testigos) para supuestamente ser comercializado en algún mercado persa (No olvidemos que estos objetos no son robados ni encargados por el pueblo, sino por militares retirados o coleccionistas, que gustan de estos símbolos de muerte).
Mientras que un acalorado “Ex Ministro Espina”, pedía la pena máxima para el acusado; el mismo Alberto Espina que coopero en la dictadura militar de Pinochet. Bueno; Jesús o el niño Jesús como lo llamaremos, tenía 14 años (en ese entonces) y solo una bicicleta, (como nos contó), escapó varias veces del SENAME para no volver (decía) y a pesar de que era solo un niño, tenía el peso y contextura de un hombre grande y robusto; pero solo era un niño envuelto , en el infierno y la desprotección del Estado.
No olvidemos que Baquedano, después de la batalla de “Tacna”, (siendo también joven) ya en sus tácticas militares, era públicamente criticado por el corresponsal de “El Mercurio de Valparaíso”, (Eloy Caviedes) y mientras Baquedano (histérico) , ordenaba detener al periodista a bordo de la Corbeta Abtao, negándole todo derecho de informar; nos habla de un hombre fuera de toda normalidad ética y mental, (como para ser objeto de monumento).
Sin embargo como en Chile la pobreza intelectual, moral y cultural se avala (a veces) con grandes construcciones o monumentos, se construyó la escultura del ya muerto Baquedano, por pedido de Carlos Ibáñez del Campo quién más ni menos, fundó Carabineros de Chile y siendo además este hijo de conquistadores españoles, (el Señor Ibáñez), mando a hacer en los talleres de la Escuela de Artes y Oficios, (la actual Universidad de Santiago, la ex Universidad Técnica del Estado). la innecesaria escultura; (la que según dicen o dijeron), se hizo con aporte popular.
Estafue hecha con bronce fundido y está apernada por sus cuatro ejes, por lo que fue muy difícil derribar; hasta que un viernes 12 de marzo del 2021, (después de varios intentos del pueblo), durante la madrugada, fuera al fin retirada
El sábado 11 de enero del 2020; se cuenta otra historia. La espada del genocida había desaparecido misteriosamente, y según se cuenta entre los asistentes, esta pasó por muchas manos antes de ser escondida, pues NUNCA fue el objetivo venderla (según testigos)
El niño Jesús, (nuestro principal personaje) aquella noche dormiría como nunca abrazado a un sable;” (El sable de Baquedano, según se dice), a pocos metros del Parque Bustamante. Esa noche Manuel Baquedano debería sentirse orgulloso, que aquel niño que vivía en la calle, fuese quien cargara con el arma perdida y asesina; la inocencia del niño Jesús protegería su sable , esa noche fue su guardián , esa noche durmió protegido, esa noche nació una nueva y mejor historia que contar; La del sable de Baquedano; esa noche aquel niño Jesús, alto, robusto y moreno fue quien cuidó el sable, esa noche Jesús tenía una nueva historia que contar ; esa noche Jesús tuvo sin saber el sable que mató a nuestros hermanos Mapuches, Peruanos y Bolivianos, esa noche Jesús durmió con un pedazo de la historia y se despertó cambiando el futuro de todo un país; esa noche Jesús fue el héroe de Baquedano , esa noche el sable ya no estaba manchado de sangre, esa noche el arma asesina estaría limpia, esa noche Jesús ( el niño del Sename) quedaría para siempre en esta historia .
A JESUS, Y TODOS LOS NIÑOS Y NIÑAS QUE VIVEN EN LA CALLE ARRANCANDO DEL INFIERNO DEL SENAME.
2 Comentarios
super !
Que desgracia que todo se haya diluido en el panorama actual, muy buena reflexión y retrato de la realidad