La tarde noche del Jueves 29 de mayo Ciudadanos Records se tomaba el Espacio del Ángel, Ex Teatro del Ángel, para dar vida a su primer festival, desde mimos a humoristas, desde reggae al rock, en un escenario subterráneo del que la música y las risas ascendieron tres pisos, para retomar su lugar en los pasillos enmascarillados del centro.
Mediante música, alcohol y congenio el primer festival de Ciudadanos Records logró generar una experiencia Cinzana, que permitió observar al artista mezclado entre su propio público. La jornada fue presentada y guiada por el humorista Alejandro Venegas, la primera banda fue Ramón Ramón, siguió con la onda rock con Zánganos De La Plebe con Gastón Gómez, para luego traer risas el Mimo Selman, cerca de las 20:30 horas tocaría la banda soul/reggae La Moringa, la banda reggae Hēre sería la penúltima banda, para al final de la noche terminar con Jony Calleja.
La música se hizo presente en conjunto de la inspiración y demandas de quienes tocaban al frente, por ejemplo Hēre habló del Wallmapu, de las hidroeléctricas y de la constituyente, Calleja se refirió al espacio del Ángel como un lugar donde, por más de 60 años, han sucedido diversas instancias culturales, desde presentaciones de Víctor Jara a obras de teatro.
De esta forma, el escenario, durante 5 horas, se convirtió en un espacio donde los y las artistas parecieron llevar al espectador por un paseo por las grandes avenidas de las distintas ciudades del país. Ya sea Valparaíso, Concepción o Santiago el primer festival de Ciudadanos Records logró resumir en una pequeña parrilla de artistas, una variedad de estilos suburbanos en un espacio subterráneo; es decir, un estilo underground.
Hay personas que dicen que todo va en círculos y eso parece ser el caso, de pasar a ser un centro cultural en la época de los 60, al hoy en día llamado Espacio del Ángel que reúne, de la mano de ZMOL, en su seno a artistas de distintos lugares del país, de diversos estilos y escuelas para brindar a sus espectadores un renacimiento del espectáculo callejero luego de casi dos años de inacción.